A ver, a ver…
Que estamos a finales de julio en España.
Que hemos tenido semanas de calor.
Que eso altera.
Que además tenemos el cambio horario.
Que es maravilloso cuando no tienes hijos,
pero cuando los tienes pues todo cuesta aún más a partir de las 8.
Hay luz, se te va la hora de los baños y la cena.
Se acuestan tarde.
Están mas cansados.
Por lo cual se irritan más.
Y hasta se ponen malos con tanto jaleo.
De hecho yo tengo a la mía pequeña con fiebre.
Cuando tienen menos de tres años todo lo anterior les afecta mucho más.
Y nada tenemos junio que salen antes.
Pues eso, que no te extrañe si están más cansados, ñoños, irritados…
Se nos va lo fundamental: descanso, alimentación y actividad física.
Y cuando esto se va, todo se va.
Así que por aquí te lo escribo.
Por si tienes que tener un poco más de paciencia o ser un poco más firme con los horarios.
Me dirás:
“¿Y lo mío? que yo también estoy más cansada o cansado”.
Pues sí.
Te respondo:
Descanso, alimentación y actividad física.
No falla.
A estos tres puntos les llamo el triángulo del bienestar.
Pero ya lo sabrás porque lo cuento en mi libro.
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